Nacida en Bilbao en 1972, doctora en Bellas Artes por la UPV- EHU del País Vasco, siendo licenciada en Pintura y Audiovisuales por la misma facultad, vive y trabaja actualmente en Madrid.
Ha participado en simposios internacionales de pintura y arte de acción en diferentes países, realizando obras específicas para distintas ciudades españolas como Bilbao o Vitoria, así como en el extranjero: San Luis (Argentina) o Minsk (Bielorrusia).
Expone y realiza performances regularmente en centros y galerías de arte. Su trabajo ha sido reconocido en diversas ocasiones con premios y becas: beca Casa de Arte la Rectoría en Barcelona, Cátedra Francisco de Goya, Ayuda a la Creación Junta de Andalucía, Muestra Itinerante Ertibil- Bizkaia, Beca de creación artística de Juan de Otaola y Pérez de Saracho, ayuda a la creación artística por la Diputación Foral de Vizcaya, beca Altea de alicante, beca de creación artística de Hondarribia en Guipúzcoa, primer premio de pintura mercARTonline, premio Encuentra 06, Fundación Norte (Uncastillo, Zaragoza), o la beca de Paradores Nacionales entre otros.
Ha realizado numerosas exposiciones y performances. Entre las exposiciones pictóricas se pueden destacar las realizadas en ferias como: la Bienal de Oviedo, Estampa, Art&Breakfast de Málaga o Art Madrid; y otras en galerías como: «Variaciones sobre el bodegón de “El Cardo” de Sánchez Cotán en el Museo de Bellas Artes de Granada» Galería Fúcares; “Verdaderitas mujeres sin historia” sala Berta Vidal de Battini, en San Luis, Argentina; “Sin historias”, Museo de la Ciudad de Móstoles, Madrid; “Próxima a revelar un secreto”, Casa del Reloj, Madrid; Exposición-homenaje a Miguel Hernández. Palacio de Congresos de Elche, Alicante; “Mirando” en Getxoarte; “Quiero que pruebes lo que siento”, Torre de Ariz, Basauri, Vizcaya
Y entre las performances: “Secret performance: todo y más” , “Mi pistola azul te mata rosa” realizadas en el festival Performensk en Minsk, Bielorrusia; “Corriendo” en la Plaza de Cataluña, Barcelona; “El día de la Reflexión” en la Plaza de España de Madrid; «No me muevo ni un milímetro» en la Facultad de Bellas Artes de Lejona, Vizcaya; “Betidanik eta Betirako akuarela” en la Diputación Foral de Vizcaya; “Paseando por un Caminito” en el Matadero de Madrid.
Parte de su obra se encuentra en instituciones y colecciones: Juntas Generales de Vizcaya; Ayuntamientos de Oviedo y Bilbao; Fundación Bilbaoarte; Paradores Nacionales; Patrimonio artístico de la universidad de Álava y de Vizcaya; Ayuntamiento de la ciudad de Elche, Alicante.
Para hablar de su obra, deberíamos preguntarnos qué sentimos al ver sus trabajos tanto performativos como pictóricos.
La performance o arte de acción es una forma de expresión artística que forma parte de la historia del arte contemporáneo. Constituye lo más efímero del arte, por lo que en muchas ocasiones no queda constancia de su totalidad. Generalmente, la Performance es irrepetible por su propia forma de ser concebida y realizada. Todo esto tiene la culpa de que en determinados momentos, Landabaso elija la Performance para expresarse. La Performance se realiza en un momento estipulado, en el cual todas las circunstancias hacen que la misma se realice de una determinada manera. Si se volviera a repetir todas esas circunstancias influyentes harían que la Performance ocurriera de otra forma y fuese distinta. En una de ellas Landabaso barre una playa. Es increíble el tiempo que ha pasado y hay cosas que no se han conseguido cambiar.
La mujer la escoba y un largo etcétera
En La mujer, la escoba y un largo etcétera, nos muestra a la mujer expulsada de forma consciente o inconsciente del colectivo intelectual. Nos enseña que quizá tengamos que seguir rasgándonos las vestiduras, incluso las más íntimas, como en La Carta, otra de sus acciones, mientras nada cambia en… ¿cuántos siglos más? ¿Cuánto tiempo más barriendo la playa?
Las acciones visualmente no se parecen entre sí, pero siempre tienen un punto de unión. Tu pistola azul me mata rosa y Las mujeres podrán ir al colegio y trabajar en hospitales y escuelas, son otras con contenido parejo.
Mi pistola azul te mata rosa
“La Performance se realiza en un determinado instante con lo que solo tienes ese preciso momento para ver lo que sucede, captarlo y sentirlo. Es eficiente e imprecisa; se dispersa muy rápido y por eso mismo no se deja coger del todo. Lo mejor que tiene la Performance es que lo que tú contemplas, cuando ésta se produce, se queda metido en tu interior. La sensación que te ha producido, lo que ha originado en ti la Performance permanece.”
Landabaso igualmente, en su pintura no prolonga sus aspectos más normativos sino que propone la reflexión sobre los contenidos y significados de sus pinturas porque el suyo es un camino que incide en las posibles aberturas de la representación y en la recreación de acontecimientos, sucesos e historias. Su trabajo es, además, un elogio de la pintura como un lenguaje que está vivo y que se mantiene en continua transformación sin dar tregua a los vacíos.
Aunque el resultado de estas estrategias parece simple, Landabaso, no renuncia a las calidades y persigue tanto los efectos matizados como las lecturas variables según sea el grado de complejidad de las composiciones. Ni es casual la elección de los temas, ni los son los títulos, mensajes, palabras, formatos, motivos y colores empleados.
Tanto sus acciones o performances como sus pinturas hablan de un imaginario en primera persona al que se puede dar innumerables interpretaciones e incluso proporcionar las razones por las que elije dichas imágenes puesto que se trata de una realidad a veces vivida, inventada o imaginada. Se trata de acumulaciones alusivas al universo femenino, que configuran un espacio pictórico con una clara actitud performativa. Aquello que la artista viene llamando Universos cursi-punk -un proyecto conceptualizado y performatizado por la artista que reúne tanto pintura como performance, como comenta la comisaria de arte Emma Trinidad en uno de sus textos.
Las pinturas de Landabaso combinan imágenes con mucho color y un lenguaje plástico cercano al arte pop y a la nueva figuración.
“Me gusta burlar ese vicio humano que consiste en querer encontrarle sentido a las cosas, cueste lo que cueste, o imponérselo por las bravas”
Mis cuadros no encierran eso. Mis cuadros contienen lo que quieran encontrar los ojos que los miren, proponiendo la total libertad de los deseos.
En mi recuerdo están las miles de imágenes que me han acompañado y me acompañan, con las que cuestiono los mecanismos de poder y las jerarquías de género. Una lucha de las mujeres y los estándares establecidos que están en la base de mi pintura. Utilizo de una u otra forma la figura de la mujer recontextualizándola y proporcionando un nuevo significado que siempre viene dado por el que mira la obra. Lo inmediato es para mí el motor de un trabajo basado en la provisión, el diálogo entre el color y la forma, y en el acto de la elección ante tanta imagen.
Toda ello me ayuda a crear una especie de mapa personal, teniendo en cuenta las cuestiones de género.
Las redes sociales me interesan porque sus imágenes pre configuran nuestra experiencia de las cosas y condicionan lo que luego vamos a experimentar, como si nos contaran siempre la película que vamos a ver.
En este sentido, he tratado de establecer un cierto orden en algunos de los temas recurrentes de mis obras, un modo de organizar las fuentes visuales de mi trabajo, que casi siempre arranca de una imagen estática… o bien del recuerdo de una imagen estática. Incluso las películas o los libros me interesan en tanto que puedo congelarlos en mi cabeza primero y luego trasladar esa evocación al papel.
En mis obras remito a micromundos muy concretos, hábitats que son autónomos aunque tangenciales, y de los que se puede imaginar muchas cosas detrás de lo que se ve.
Es en líneas generales un pretexto para pintar de forma expresiva, dando lugar a lecturas abiertas en las que se plantea la narración como una posibilidad más.
Estoy en la búsqueda continua de un sentido de inmediatez y franqueza que nos hable de nuestro tiempo.
Mi pintura, en la que a veces se cuelan líneas y objetos, está inspirada en palabras, anuncios publicitarios, la vida cotidiana o el propio arte. Hay una diversidad formal y técnicas diferentes, pero todas ellas están en la misma sintonía, tienen el mismo tono.
Se trata de un mundo fragmentado de simultaneidad. Es algo que se puede leer hacia delante y hacia atrás unido en su principio y fin. Es una pintura con imágenes seductoras vivamente coloreadas.
En mi obra hay dos partes, una que refleja mi yo singular y otra que saca a la luz el yo múltiple y fragmentado. Juego con los límites del soporte, realizo una separación real en el interior de la superficie del lienzo, consiguiendo que estos funcionen como cuadros internos, inexistentes fuera del que los contiene.
Intento que estas formas autónomas, reguladas mediante criterios de coherencia, aseguren la unidad de la obra. Poco tiene que ver con el realismo, son guiños irónicos.
No pido a los espectadores que hagan nada en particular o diferente a lo que hacen cuando caminan por la calle y reciben las sensaciones de todas las imágenes que ven cualquier día de su vida. Lo único que me interesa en la obra es el resultado final, la imagen, y no establecer una posible comunicación con el público. Es algo más parecido al teatro o la ópera, se trata de una representación.
Creo que la fragmentación es mi manera personal de afrontar un cuadro, es mi vocabulario. No estoy convencida de que tenga algo que ver con la sociedad existente o con el papel que el arte o mi propia obra pueden tener en esta sociedad. No aspiro a retratar mi momento histórico ni la sociedad actual, se trata de algo más íntimo. No pienso en el espectador cuando pinto, sino en lograr mi propia letra, mi propio lenguaje.
Se trata de no decir acumulando mucho, o decir únicamente en el terreno de las grandes narrativas. Como un discurso en torno a las posibilidades del lenguaje más allá de estilos falocéntricos y semejanzas. Desocupar de contenido y hacer que las posibilidades se disparen.
Las incorporaciones que realizo de toda clase de elementos invitan a pensar su discurso como el resultado de una amalgama de fragmentos montados alrededor de un tema central omnipresente: la mujer.
NJOY Art!
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