
Isaura Duarte ha sido actriz y escritora desde su adolescencia. Sus poemas y relatos los mantendría en silencio y gestación hasta hace pocos años. Trabaja las artes visuales, el performance, la fotografía y la video-poesía como un medio de expresión para sus escritos.
Isaura Duarte escribe desde su intimidad, mezcla el estilo narrativo con el poético, las imágenes la trasladan a un espacio onírico desde donde busca conectarse con la honestidad, la poesía y el arte en sí mismo. Para ella, escribir es un proceso de sanación y liberación.
Es miembro de la Asociación de Escritores Hispanos (AEHIS) y su revista Litterae Magazine, que reúne a poetas de 11 países de lengua hispana.
Actualmente está representado a su país (Venezuela), en el II Concurso Internacional de Poesía J. Bernavil 2021 en homenaje a la poetisa española Pilar Paz Pasamar.
A la par, se encuentra escribiendo su primer poemario, el cual será publicado por la Casa Editorial J. Bernavil.
EN TU LIMBO
Me he quedado detenida debajo de este marco viejo y desteñido
Las polillas hacen montículos sobre mis pies
Mis dedos desprenden las huecas franjas de la madera
Me atraviesa de repente este olor a tierra de los últimos días
Mientras
me voy dejando ir en este crudo silencio
He visto aquellas mariposas negras enormes
que siempre me han estremecido desde niña
Espántalas
Te digo
¡Espántalas!
En estos pasillos donde la gente no para de rezar
me he encontrado de cara con el escalofrío
No hay fuegos de medianoche
No hay risas en las ventanas
No me he recordado en las últimas horas
El rechinar del vidrio me ve y pregunta
No sé cómo mirarle ni cómo contestarle
A esa que ya no veo
Me mudé a tu lado y me he quedado custodiando este limbo
He puesto mi rostro sobre tus ojos
para poder oírles
He puesto mi voz al borde de tu puerta
He volcado todas las estrellas de mis delirios reclamando nuestro despertar
Sólo he podido decir interminables veces
Regresemos
Regresemos
¡Regrésanos!
A nuestra vieja casa de laureles
De color verde oliva
O a otra
A cualquiera
Somos un viento del norte
No somos de un sitio
Somos un destino
¡DESPERTAR!

ENTRE SORTIJAS
A veces siento la necesidad de
recostarme en las paredes frías.
También busco las sombras,
ellas escuecen en mi cabeza,
se arriman a las tablillas de la biblioteca,
se me escurren por los ojos
y luego se desvanecen…
A veces no llego a verlas,
se recogen en mi vientre
y poco a poco,
pierden fuerza…
Se ponen cálidas
como la tierra henchida de mediodía.
He tenido mis manos cerradas.
Han querido asegurarse de la permanencia de sus recuerdos,
de los tactos tibios y de los tactos serenos.
Los dedos se me han quedado cruzados,
abrazándose entre sortijas.
Hoy llevo la de mi madre,
la única que puedo jurar que
nunca me quitaría ni nunca me quitaron.
Ellos también se disuelven,
son luciérnagas que vuelan,
que se ahíncan y se aflojan,
y otras tantas,
revolotean en mi cara
dejándome el canto y
el aguardiente de hierbas
de mis años de infancia.

ELLA Y YO
Ella y Yo nos parecemos
Ella miente
Yo callo
Ella golpea
Yo cierro mis puños
Ella respira el humo de los carros
Yo me pierdo entre ellos
Ella escribe sin parar
Yo leo título tras título en las vitrinas
Ella está dentro de las páginas
Yo las tengo entre mis manos
Ella se levanta y da unos pasos
Yo me siento y los escucho
Ella se detiene a observarme
Yo me volteo para no verla
Ella gira y toma mis piernas
Yo la aparto y la rechazo
Ella se molesta
Yo me molesto
Ambas nos quedamos en Silencio
Pasa el Tiempo
Ella hurga en mi mente
Yo la lleno de trampas
Ella toma mis manos
Yo sigo con ellas en el piso
Ella siente frío
Yo siento cómo se congelan
Un Breve Momento
Ella siente el rechazo
Yo no quiero retenerla
Ella llora
Yo trato de sonreír
Ella trata de sonreír
Yo sigo llorando
Las Dos nos parecemos Tanto.

S E R
Sé la caricia
aunque no sepas de quién
Sé el recolector de silencios que
las voces
a veces
nos condenan sin entender
Sé tan suave que apenas te sientas
el tacto viene de otras fuentes
que no comprendemos en la piel
Sé huellas de mar
Él siempre ha sido de viajes profundos
Sé la piedra que sostiene
Sé el destino de la historia
Sé el valiente y sé su variable
que la vastedad está en comprender que
en nuestro Ser
el humano y el ángel
tienen el mismo viaje.

BOCADO
Duerme en mis ojos,
duerme.
Hoy se ha despertado el frío en las montañas,
la verja guarda el agua para untarme en la madrugada.
Me dejaré,
como un pan caliente a la espera de mantequillas.
Me volveré el bocado del que todo ha perdido porque me sabe mucho,
porque patea con los dientes y se juega todo aunque no quede nada.
He visto que las mariposas vienen hacia mí y les he confesado que tengo la sensación de no saber(me).
No hay cuidado,
que no hay nada que perder
más que las esperas y la memoria.

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