El Entroido de Cobres, momento ideal para visitar y descubrir un tesoro natural en la ría de Vigo

Las Salinas de Ulló, el Forno de Cal o la ruta de los molinos de río Maior son algunos de los enclaves de obligada visita en Vilaboa.

El Entroido de Cobres calienta motores para la celebración de una de las fiestas más emblemáticas del carnaval gallego. Tiene lugar en Vilaboa, un pequeño municipio situado entre las ciudades gallegas de Vigo y de Pontevedra. Madamas y galanes intensifican ya el ritmo de sus ensayos y actividades promocionales para acudir a su cita anual, este año durante los primeros días de marzo, en las mejores condiciones. Setenta parejas de baile, de todas las edades, ponen a punto estos días sus danzas y vestimentas que les llevarán a recorrer decenas de kilómetros para acercar el Entroido a cada rincón de Vilaboa. Lo harán caminando y ataviados con sus trajes típicos y coloridos, portando con orgullo cada cinta y cada abalorio que simbolizan la conservación de una tradición ancestral que va pasando de generación en generación.

Madama y Galán en As Salinas

Durante los días que se celebra el carnaval, este año del 1 al 4 de marzo, desde las diez de la mañana hasta que se pone el sol, Madamas y Galanes recorren distintos lugares de las parroquias de Santa Cristina y San Adrián, acompañados por una charanga (gaiteros); con los bailes, la música (jotas, muñeiras, el agarrado) y la popular Danza de Os Cobres –propia de la zona- llevan la fiesta de puerta en puerta, especialmente a aquellas cuyos residentes que por algún motivo  no pueden asistir a los tradicionales actos de celebración del Carnaval. El Entroido de Cobres es, sin duda, uno de los más llamativos, vistosos y atractivos de los que se desarrollan tanto en Galicia como en la provincia de Pontevedra. Su singularidad procede tanto del mantenimiento de una tradición única, como de ser testigo de un tiempo pasado, el colorido de la indumentaria empleada, el desarrollo de originales actividades como de la alta participación e implicación de los asistentes que son, de algún modo, integrados en la celebración.

Los días de celebración del Entroido de Cobres es el momento perfecto para descubrir el encanto turístico de Vilaboa, municipio situado en pleno corazón de las Rías Baixas y con una gran riqueza patrimonial y cultural.

La primera parada en un recorrido por las entrañas de Vilaboa debe ser en las Salinas de Ulló, un enclave que cuenta con una web propia que facilita la comprensión del entorno (salinasdoullo.gal); un pequeño tesoro natural, un reducto a salvo de la masificación al que acuden amantes de la sostenibilidad buscando una conexión con el medio a través de los sonidos de la flora y la fauna local, desconocida para la gran mayoría de los visitantes, que se acercan al mayor complejo salinero que se conserva en Galicia y cuyo origen hay que buscarlo en el siglo XVI. En el siglo XIX, no obstante, las salinas dejaron de ser tan rentables y en esta fecha se construyó aquí el primer molino de mareas de Galicia, que aprovechaba las corrientes del fondo de la Ría y generaba energía hidráulica. Fue una obra del ingeniero francés Felipe Augusto Cazaux, que participó en obras del ferrocarril en Redondela y Tui, fijando su residencia en este enclave. Códigos QR instalados en el entorno permiten localizar todos los elementos detallados en la web, entre los que destacan las ruinas industriales de la Granja, uno de los principales atractivos turísticos de Vilaboa y de la ría de Vigo.

Salinas de Ulló

Otro entorno natural de obligada visita es la Ruta dos Muíños salpicados por el cauce del Río Marior, en Cobres. Se trata de un conjunto de molinos tradicionales, restaurados y puestos en valor  que nos guía por un sendero espectacular a la vez que nos ayuda a entender los antiguos sistemas de molienda de cereales.

Muiños de Río Maior

También en Cobres se alza el Forno do Cal, una construcción industrial recientemente recuperada, que hoy rinde homenaje al duro oficio del encalado realizado en  hornos industriales en donde la piedra caliza era quemada para convertirla en cal o yeso destinado a múltiples usos. 

Forno do Cal

La capilla de Santa Marta, en uno de los tramos del Camino Portugués que atraviesa Vilaboa; el Monte do Cabalo, con una impresionante vista de la ría de Vigo y la ensenada de San Simón o el parque de Cotorredondo son algunos de los enclaves naturales que Vilaboa atesora y que complementa con una rica oferta gastronómica y de alojamiento que puede consultarse en la web municipal 

Capilla de Santa Marta